Tres libros, tres mundos

Esta semana te traemos una selección pensada para lectores que buscan algo más que entretenimiento: tres libros que interpelan, conmueven y despiertan nuevas preguntas. Desde una relectura provocadora de un relato bíblico hasta una historia real que desafía la lógica y la tecnología, pasando por una guía espiritual que propone soluciones simples a los dilemas más complejos, cada título fue elegido por su capacidad de resonar con nuestro presente. Si estás listo para una experiencia literaria que te deje pensando, esta es tu oportunidad.

Una mirada renovadora sobre el profeta Jonás y su mensaje, que trasciende el tiempo y se conecta con los dilemas humanos actuales. Con rigor académico y sensibilidad espiritual, María Cristina Kunsch nos invita a recorrer las calles de Nínive, entender las motivaciones del personaje y descubrir las implicancias de sus decisiones en un contexto sorprendentemente parecido al nuestro. Este ensayo no solo ilumina el relato bíblico, sino que lo convierte en una conversación abierta con el lector contemporáneo.

Un cuaderno rayado. Otro cuadriculado. Trazos a lápiz. Números. Flechas. Silencio.
Sin tecnología, sin claves, sin ayuda externa. Solo papel, método y paciencia.
Este libro revela una historia tan insólita como real: cómo un sistema rudimentario logró resultados precisos que cruzaron fronteras y desconcertaron a medios de América, Asia y Europa. ¿Fue suerte, cálculo o talento? Lo cierto es que funcionó, y quedó documentado. Más que un relato, es una demostración incómoda y fascinante. Abrí el libro. Después, no vas a poder dejarlo.

¿Es posible vivir con paz interior en medio del caos? Silvina Carnevale propone una guía transformadora que combina espiritualidad, neurociencia y sabiduría ancestral para enfrentar los desafíos cotidianos con soluciones simples y profundas. Desde el cuerpo como obra perfecta de la creación hasta el poder de los pensamientos para moldear la realidad, este libro invita a reconectar con lo esencial, recuperar la confianza y vivir con propósito. Ideal para quienes buscan respuestas, pero también para quienes están listos para cambiar las preguntas.